Para los amigos..

La noche de los historiadores
En la fría noche, con amigos y compañeros, con el alcohol como aliado y la diversión por bandera, nos dispusimos a pasar una velada inolvidable.Bebimos, debatimos, bailamos y reímos entre los helados coches de una calle asfaltada por botellas de cristal y bolsas de plástico. La felicidad llenaba nuestros corazones ante las expectativas de una noche que prometía ser inolvidable.   Mas los caminos de la dicha se torcieron cuando un ogro calvo con traje de chaqueta nos impidió el paso. Sacamos entonces a relucir nuestra voluntad cual afilada lanza y nuestras ganas de pasarlo bien cual robusto escudo y el alcohol guió nuestros pasos, como buscando reforzarse con nuevas copas, hacía la calle de nuestro hermoso río. Allí, entre el calor de los camaradas, con la calidez del alcohol y el ritmo de la música, entre cervezas y bailes, cambió nuestro sino. La danza brasileña fue la triunfadora de la noche, y nosotros fuimos sus dueños, unos intelectuales borrachos, bohemios poetas de la vida para los que la diversión de aquella noche era la más bella de todas las rimas.